Consejos clave de accesibilidad: Imágenes

Los elementos visuales aceleran la comprensión, pero asegúrate de comprobar la accesibilidad de tu contenido cuando añadas imágenes.

En primer lugar, es importante saber si la imagen que estás añadiendo forma parte del contenido o es solo un elemento decorativo que no afectaría a la comprensión si no estuviera allí. Añade etiquetas ALT sólo a las imágenes que no sean decorativas.
El texto alternativo sirve para describir las imágenes a los alumnos que no pueden verlas y utilizan programas de lectura de pantalla. Esto incluye a los lectores de pantalla y a los navegadores que bloquean las imágenes, pero también a los usuarios con problemas de visión o que no pueden identificar una imagen de otro modo.

Para asegurarse de que las imágenes son accesibles, es importante repetir el texto de la imagen en la descripción alt si no es decorativo.

Una etiqueta ALT debe proporcionar suficientes detalles para que los usuarios y los motores de búsqueda relacionen la imagen en el contexto de la página, pero en un breve resumen de no más de 125 caracteres. Por lo tanto, las imágenes complejas necesitarán descripciones alt más largas, como parte del texto que las rodea.

Si se utilizan imágenes como hipervínculos, hay que asegurarse de que las personas que no puedan ver la imagen puedan decidir si quieren hacer clic en el enlace que representa.
Del mismo modo, la gente tiende a utilizar el color para dar significado o para representar significado en el texto. En cuanto al color, hay que tener en cuenta a las personas con problemas de visión, daltónicos o impresos que incluyan una versión en blanco y negro de la imagen.

Si es necesario, se puede recortar la imagen solo por la parte importante para facilitar la comprensión.

A la hora de añadir imágenes o texto a las imágenes, hay que utilizar siempre un contraste de color suficiente para que sea más fácil distinguirlo.

Uno de los asistentes preguntó cuál era la longitud ideal/recomendada para un pie de foto alternativo. Lo ideal sería que tuviera 125 caracteres o menos. Menos es mejor, siempre que se transmita claramente el propósito y el significado de la imagen. Se trata de proporcionar material en torno a ella. Si es realmente complicada, no la describirás en menos de 125 caracteres.